EVOLUCIÓN Y PERCEPCIONES DE LA CULTURA CHICHA EN NUESTRO PAIS
EVOLUCIÓN Y PERCEPCIONES DE LA CULTURA CHICHA EN EL PERU
Miguel Noa Vílchez 20095479 Kristhel Ramos Rodríguez 20095100
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CHICHA NUESTRA
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EVOLUCIÓN Y PERCEPCIONES DE LA CULTURA CHICHA EN NUESTRO PAIS
¿Qué es la cultura chicha? ¿Es acaso un arte? ¿Un estilo de vida?. Decidimos y nos interesamos por tocar este tema, primero
por
que
como
diseñadores
gráficos
quisimos
comprender de un modo más profundo, todo el origen y la historia que existe detrás de la gráfica denominada chicha, la cual es tratada de un modo peyorativo por muchas personas en nuestro entorno social, y es incluso descalificada como estilo estético. Así nos encontramos con toda una cultura, producto de un choque cultural, luego del incremento de las migraciones hacia la capital, que trajo consigo costumbres
y cosmovisiones
propias, alejadas de lo que los limeños consideraban como culto. Tenemos la idea de que en nuestro país y sobre todo en nuestra capital, la convivencia y el respeto de culturas distintas será siempre un ejercicio muy complicado, sobre todo cuando estas poseen orígenes distintos. Lima estará siempre sujeta a constantes cambios, al igual que las subculturas que en ella se forman.
No
existirá
jamás
una
cultura
homogénea.
Encontraremos que nosotros mismos somos producto de un constante
proceso
de
aculturación.
Esta
presencia
características múltiples de nuestra sociedad
de
deben ser
considerados como algo que engrandece la diversidad del país, debemos saber rescatar lo bueno de cada aspecto, y comprender que la trasformación o el cambio de un cultura es un proceso natural, mientras tanto debemos aceptar y respetar las culturas ajenas a la nuestra. En el siguiente texto hacemos un análisis breve de todo lo que dio origen a la cultura chicha, y como transformo está el panorama limeño, participando en un proceso activo de transformación de la cultura limeña.
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CHICHA NUESTRA
La cultura en el Perú Según Marvin Harris, la cultura es el conjunto aprendido de tradiciones y estilos de vida, socialmente adquiridos,
de
los
miembros
de
una
sociedad,
incluyendo su conducta. Para el sentido común, cultura se refiere a lo elevado, ya que se la asocia con la clase alta. El autocontrol, los estudios y el conocimiento, conforman lo culto; mientras que la ignorancia, falta de estudios y lo popular se relaciona con lo inculto. La cultura, en esencia, esta formada por tradiciones, valores y conocimientos de un determinado grupo humano, que sirve de ejemplo a las generaciones siguientes. En el Perú coexisten múltiples culturas,
lo que
debería entenderse como algo positivo, que enriquece
El incremento del flujo migratorio, creo u nuevo panorama en la capital, la mayoría de migrantes se dedicó actividades informales
nuestra identidad como nación, pero aquí no ocurre eso, por el contrario hay una pre disposición a no aceptar tal situación. La convivencia de varias civilizaciones con lenguas, creencias y normas diferentes, es un fenómeno que ha estado en el Perú incluso desde la época neolítica, en la cual el hombre inicia un proceso de sedentarización, para posteriormente identificarse como parte de un grupo y formar una cultura propia. Con la llegada de los españoles, la diversidad en el Perú era muy evidente, encontraron una gran cantidad de pueblos con conductas culturales diversas, que se distinguían por sus dialectos y tradiciones. Fue la época en la que se produjo un gran choque cultural mediante un proceso traumático, que marco para siempre el orden de una sociedad heterogénea. En aquel tiempo se fue formando la ideología estamentaria de razas, que se establecería en el inconsciente colectivo hasta nuestra época, que acepta la superioridad de una raza o cultura sobre la otra. Los europeos se convirtieron en la raza dominante, a pesar de no ser la mayoría, y quisieron insertar a la fuerza sus costumbres e ideologías en una sociedad que poseía una cosmovisión muy diferente. Como resultado se creo una gran brecha que separaba a gente con cultura o la europeizada, y la o tra ignorante e inmoral. Hubo entonces una gran confusión y un desorden, puesto que los rasgos que el peruano indio debía asimilar a la fuerza, no fueron tomados estrictamente como tales, sino que más bien se creó una mezcla de ambas culturas, una suerte de reinterpretación que cogía características de cada una para crear una propia cultura. Como ejemplo podemos mencionar a las fiestas patronales actuales, que se llevan acabó sobretodo en lugares de la sierra, las cuales llevan un gran carga religiosa, que puede tomarse como una herencia europea, pero
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que de algún modo se mimetiza con las costumbres de los peruanos más antiguos, quienes realizaban ciertos rituales e ingerían bebidas en nombre o en honor a una divinidad. Lo mismo ocurre en las mencionadas fiestas, en la cuales las bebidas alcohólicas son infaltables. Tomando en cuenta las distintas razas que convivían durante la época colonial (chino, negro , indios, mestizos, criollos, etc), veremos que se produjeron múltiples subculturas, pero aun manteniendo el pensamiento de que el modo europeo era el modelo a seguir, el correcto. Hasta este punto podemos hacer una comparación con la situación vivida en la capital, durante la época del incremento del flujo migratorio a partir de los años cuarenta, pues se produjo también un choque cultural, quizás no de tanta dimensión como la producida en la época colonial, pero si de gran trascendencia. A la capital llegaron, por diversas razones (como la improductividad de las tierras o la violencia terrorista), muchas personas provenientes de la sierra, las cuales poseían una cosmovisión muy diferente a la limeña, presentaban costumbres distintas, un modo de vestir diferente, modo de hablar y expresarse. La ciudad limeña de aquella época no era aún esa ciudad desordenada que hoy conocemos, no existían los conos, y los habitantes eran en su mayoría descendientes de los criollos y españoles, su pensamiento era más ligado hacia patrones extranjeros de vida, mientras mejor emulaban o copiaban dichos ideales, más cultos se volvian. Paulatinamente los migrantes andinos fueron ganando presencia en la ciudad capital, cambiando totalmente el paisaje urbano y transformando su economía. Es así que se produce este choque cultural, mediante el cual la cultura andina asentada en la capital, coge y adapta rasgos de la cultura limeña, que a su vez era resultado de un proceso de aculturación global, y los combina con sus propias ideas y costumbres. Con la llegada de esta masa de gente, el paisaje urbano cambio totalmente en Lima, se dio inicio a al crecimiento de los conos y se acentuó el centralismo en la capital, asimismo se incrementó la actividad comercial y se transformó la economía urbana.
La cultura chicha El término chicha surge en los años ochenta para referirse a la irrupción de las sociedades andinas en la capital, señalando de este modo a la urbe popular que fue surgiendo y reemplazando a su vez al término criollo, comúnmente usado para identificar a la sociedad limeña. La cultura criolla manifestó siempre un sentimiento anti indígena y tenía como fin un alcance nacional, a diferencia de la sociedad andina, quienes no tenían la misma pretensión nacional.
El término criollo fue usado en un principio por los españoles para denominar a todo aquel ser, humano o animal, nacido en las “Indias”. Con el pasar de los años, su uso se volvió distintivo de los descendientes españoles en tierras peruanas, elevando así el uso de éste vocablo. Años después paso a tener un significado popular y despectivo desde la perspectiva elitista. Esta cultura se volvió manejable y receptora de nuevos aportes masivos, producto del
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choque cultural que causó la migración interna de los pueblos andinos en un primer momento y selváticos después. A pesar de la dificultad causada por la llegada de nuevas sociedades a la capital peruana, la población andina trato de seguir las pautas sociales y exigencias que traían consigo la llegada a la ciudad, sin dejar de lado sus costumbres, escogieron las más adecuadas, para así formar una nueva cultura denominada: chicha. Entonces el termino chicha se introduce con el objetivo de crear una diferenciación por parte de los sectores más privilegiados, aquellos que se consideraban dentro de los parámetros de lo “culto”, Chacalón se convirtió en ídolo de las quienes buscan establecer distinción entre una zonas más populares de Lima y en icono de la festiva música chicha sociedad que tiene como base el “buen gusto” y 1 otra de carácter parrandero, huachafo , y hasta grosero. Este proceso se conoce como una tipificación, que se realizó desde la costa contra la cultura andina, mediante la cual se encasillaba al migrante andino, diferenciándolo por tener un carácter trabajador, con miras al ahorro, sin dejar de lado la fiesta y el desorden, se creía 2 que este apelaba a cierto grado de violencia y achoramiento , y aplicaba conocimientos básicos para sobrevivir.
La Chicha en el ámbito musical La música chicha es el resultado de una fusión rítmica y melódica, entre géneros como la cumbia, huaino y tropical, hecha por instrumentos por lo general ajenos a nuestra cultura, pero que expresaban los sentimientos más profundos de una sociedad en pleno desarrollo, la cual disfrutaba del baile como medio para socializar y divertirse. El contexto en el que se desarrolló la música chicha, fue un periodo en el que la población andina se vio obligada a tomar espacios urbanos de la capital, para así iniciar una nueva etapa 1
El término huachafo es comúnmente utilizado para marcar o definir un estilo que según la sociedad alta del País es considerado copia o farsa. Frecuentemente usado como sinónimo de cursi. 2
Es un término que surge a partir del peruanismo “choro”, el cual sign ifica ladrón e inmoral. Así el achoramiento viene a ser esa actitud o comportamiento que apela a la viveza criolla y aprovechadora para lograr lo que uno desea, en este sentido podría ser remplazado por el término fighter . También puede ser entendida como el ingenio de los sectores populares para poder sobrevivir y lograr un desenvolvimiento económico favorable. El termino achorado fue usado para catalogar a aquellos individuos de los sectores populares que recurrían a la informalidad para cumplir sus deseos o necesidades, entre ellos se consideraba por ejemplo a los que asistían a las populares fiestas chicheras , las cuales siempre terminaban en peleas provocadas por el exceso de alcohol.
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de vida, donde regían los cambios y la adaptación en términos sociales, económicos y políticos. Fue así que para los años sesenta, este grupo ya se consolidaban como una mayoría social importante, donde la música se volvió una fuente de identificación social masiva. Lima paso de ser la ordenada ciudad de los reyes, donde abundaban los descendientes de españoles, a una lima repleta de inmigrantes provincianos, convirtiendo a la ciudad en bullicio, desorden y caos, donde la chicha surgió como una mejora de los lentos huainos, transformándose en cumbia, melodías llenas de alegría y baile. Fue durante el año 1983, en que la música chicha era bienvenida en cuanta fiesta, polladas, kermeses y parrilladas había. La chicha se volvió un factor masivo impulsado por la acogida en las radios y la deslumbrante publicidad, en la que se observaban banderolas y carteles fosforescentes en todas las avenidas y paraderos de los conos. Estos avisos publicitarios estaban atiborrados de palabras, que indicaban el grupo, horario y lugar donde tomara lugar el concierto, poseían una diagramación que guardaba jerarquía según el tamaño de las fuentes hechas a mano e impresas en serigrafía artesanal. Los conciertos chichas podían durar de la mañana hasta muy tarde, con una venta ininterrumpida de alcohol colocada en puntos estratégicos del lugar. El costo de estos variaba desde 3 a 10 soles, siempre a un módico precio para que acudan familias, parejas y grupos de amigos. Ya en el escenario un mediador, conocido como animador, formaba un vínculo entre el público y el artista, quien muchas veces venía acompañado de exuberantes bailarinas envueltas en polos pegados, “shortcitos’’ y zapatos de plataforma para engrandecer su presencia en el escenario. Las canciones iban dirigidas a migrantes que habitaban asentamientos humanos y pueblos jóvenes, a empresarios informales, trabajadoras domésticas vendedores ambulantes, esto se debía al contenido de las letras, que invocaban la superación, el dolor y otros temas recurrentes del flujo migratorio en la capital. En un inicio la chicha se consideró simple y con poco arreglo profesional, quizá debido a que en un inicio hubo bajo presupuesto por parte de los artistas, pero con su difusión, adquirieron mayor interés por productores, quienes les proporcionaron ingenieros de sonido, músicos de apoyo y compositores, logrando así posicionarse como uno de los géneros característicos del Perú. Esto trajo consigo la imagen del ídolo popular, el cual poseía una estética que lo diferenciaba de los demás géneros, tales como el uso de colores distintivos, en su mayoría trajes color blanco y franjas horizontales coloridas, que remataban con el uso del cabello largo y ordenado. La moda era seguida por cientos de jóvenes y adultos que acudían masivamente a escuchar y corear las canciones más conocidas de sus ídolos chicha, quienes causaban una histeria colectiva, logrando el mismo efecto que muchos artistas internacionales causaban en sus seguidores
Prensa chicha Periódicos “Chicha”, peyorativo con el que se cataloga en la actualidad a la prensa sensacionalista del Perú, dotada de artículos que resaltan el escándalo y morbo de una noticia que en su mayoría es irrelevante.
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Los diarios conocidos como prensa chicha no se autodenominaban asimismo como tal, sino que, se les tildo de esta manera, por ser el periódico de las masas, provisto de un lenguaje para las clase populares, aquel que no poseía noticias serias y eficientes, por el contrario solo buscaba llamar la atención de los espectadores utilizando colores brillantes, contrastados y sugestivos, en su mayoría rojos y amarillos, acompañados de mujeres exuberantes vistiendo pequeños trajes, como principal motivo de ventas, dejando poco a la imaginación del lector. Este medio de comunicación iba dirigido a la población migrante andina, habitantes de los conos limeños, y personas con bajo grado de instrucción que se sentían identificados con el lenguaje lleno de jergas utilizado en las portadas e interior del diario. En cada una de sus páginas se apreciaba el alto contenido erótico y morboso de las fotografías seguidas de artículos que narraban al detalle asesinatos y violaciones; la publicidad dentro de ellos, no se alejaba de esta estética degradante, ya que solo aludían a centros de regulación menstrual, damas de compañía, los mejores amarres, tónicos para enfermedades incurables, etc. El primer periódico peruano que se catalogó como chicha, por ser seguidor de la estética tropical andina, fue El Popular, que para los años ochenta, en los que el cine y la televisión surgían, debían contener portadas llenas de imágenes con titulares llamativos y breves.
Sobre al arte y el estilo chicha En las últimas décadas esta cultura chicha, ha sido poco a poco aceptada como tal, aunque no por todos. Un ejemplo de esta inclusión es la obra realizada por artistas que toman como temática o referente a esta cultura, contribuyendo con el proceso de aceptación y de alguna manera reivindicando lo chicha como parte de nuestra cultura, colocando en las galerías piezas que se alejan del avanzado “arte culto“ y que están más conectadas con las masas y lo popular. Así tenemos por ejemplo al equipo plástico, un colectivo de artistas que en el año 2009 presentaron en el Centro Cultural España la muestra “La cuadrada, visión caleidoscópica en la ciudad de Lima”. Sus obras parten del contacto directo con la ciudad, así los afiches estridentes, las combis y autos atiborrados de calcomanías, con frases pintorescas y en general toda esa mezcla de costumbres que se convierten en estímulos visuales, para luego complementarse con el dialogo de las personas que pertenecen a esta cultura, permitiendo desarrollar
una apropiación y una descontextualización propia de estéticas y temáticas
populares, dando lugar a obras que elevan lo c hicha a la categoría de arte.
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En la fotografía se muestra una obra del colectivo, podemos ver como los aspectos formales del afiche chicha han sido tomados. Aquí
los
nombres
de
agrupaciones y otros datos han sido remplazados por frases o nombres
que
presentes
en
colectivo,
se
están el
muy
imaginario
conserva
la
jerarquía compositiva individual en cada afiche, donde existe una frase o palabra con mayor peso visual.
Aquí
funcionarían
los
afiches
de
un
no
modo
particular, el espíritu del cartel chicha es captado solo mediante
la repetición y la superposición de un cartel sobre otro, característica que de alguna manera representa el espíritu con el cual se fue formando la cultura limeña, una aglomeración y superposición de rasgos de varias culturas que no quieren perder la conexión con las raíces, pero que se convierte en algo sólido y con presencia dentro de la sociedad limeña. Esta obra es una especie de invasión de lo chicha, que irrumpe en el clima tan pacífico y neutral de una galería acostumbrada a defender obras menos “populares”. En nuestra opinión este tipo de muestras, son actividades positivas que como se dijo antes, reivindican y fortalecen a lo “chicha” como parte de nuestra cultura, algo de lo cual formamos parte de uno u otro modo, pues todos somos producto de ese mestizaje cultural, la cultura
chicha es como menciona Arturo Quispe Lázaro en su articulo “La cultura chicha”: La manifestación de todo el cambio cultural que ha sufrido el Perú, y sobre todo Lima, y que hace que la cultura sea más popular y democrática. Es así que lo chicha mantiene vigente hasta hoy una gráfica definida, cuyos colores y formas están inspirados en la vestimenta típica usada en festividades andinas, ha sido estructurada como parte de una añoranza de lo rural. Existen muchas opiniones divididas en relación a esta gráfica, algunos sostienen que es “huachafa” y que no lleva consigo ningún fundamento d e diseño, pero no hay que olvidar que por más empírica que parezca, posee una gran carga funcional, pues comunica exitosamente lo que quiere anunciar, es por eso que su vigencia hasta hoy no ha siquiera disminuido. En Lima, más del ochenta por ciento de habitantes mantiene alguna vinculación de origen andino, varias generaciones han crecido en la capital, luego de la gran explosión migratoria, La cultura chicha fue resultado del choque de culturas, nació como respuesta a la añoranza rural
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CHICHA NUESTRA
y a la necesidad de crear una nueva identidad y vínculos de pertenencia en esta ciudad. Lo chicha ha variado mucho desde que apareció, hoy no es la misma cultura que era antes, hay ciertos rasgos que se han mantenido, otros que se han adherido, así también se ha producido nuevas subculturas, nuevas identidades aún más condensadas. La globalización que impulsa la influencia de patrones extranjeros en nuestras vidas (de lenguaje, económicos, religiosos, de moda, musicales) también provoca cambios en esta cultura, podríamos mencionar por 3
ejemplo el fenómeno amixer , como rezago y mezcla de la cultura chicha con un lenguaje americanizado, que también surgió como forma de c rear una sensación pertenencia. La cultura chicha, no es un estilo que defina la personalidad social del Perú, solo una parte de ella. Encierra a varias culturas netamente peruanas y extranjeras, de las que se han utilizado los factores más resaltantes, para así crear algo nuevo, y llamativo, es por ello que los peruanos debemos aceptarla como otra de nuestras riquezas culturales, si bien es más reconocida como una estética meramente limeña, no solo por ser Lima la capital del Perú debemos adoptar esta estética como nuestra, sino por que recoge muchos símbolos y expresiones, que la vuelven valida como cultura de una gran masa. Sus características coloridas y diversas
han hecho de ella una estética que busca una
individualización de cualquier otro estilo, sin querer llegar a suplir otro ya existente. Lo que se quiere lograr, es que se acepte a la cultura chicha como una más de las miles de estéticas residentes en el país, respetándola y haciendo validar su lugar. Reconocemos que la cultura chicha es válida como estética, pues identifica a un gran grupo social. Siempre existirá conflictos de aceptación y coexistencia, sobre todo cuando hay un choque de culturas de orígenes diferentes, habrá siempre una especie de competencia para validar a una como la cultura oficial, lo que a nuestro criterio proviene de intenciones muy ingenuas, pues no podemos pretender instaurar un solo modelo de
“cultura” para todos,
además hay que tener en cuente, como se dijo anteriormente, que la cultura en Lima y en el Perú estará siempre sujeta a constantes cambios y nuca será la misma.
La sociedad peruana es el resultado de un gran mestizaje cultural, y siempre estará afectada por influencias externas e internas, sufriendo una constante aculturación. Es inevitable que en nuestro país hayan múltiples subculturas, debemos aprender a convivir con ellas, y ______________________________________ 3
Según el historiador y sociólogo Nélson Manrique : El término amixer cumple una función de discriminación estética, pero su uso habitual rebasa ampliamente este margen. La definición de lo bello, armónico, equilibrado y grato – por oposición a lo feo, disonante, desequilibrado y desagradable– termina incorporando inevitablemente una valoración etnocéntrica: lo que mi grupo social considera bello, correcto o valioso es la medida desde la cual debe juzgarse – y calificarse– la pertinencia o impertinencia de las preferencias estéticas de los o tros.
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alejarnos de la idea de que nuestro modo de pensar, vivir y hablar es el único aceptable y correcto, pues de lo contrario estaremos cayendo en la intolerancia y la discriminación. Debemos aprender además a aceptar los cambios en la cultura como parte de un proceso natural, que se dará constantemente. Se debe trabajar en proyectos más inclusivos, desde el aspecto político, económico e incluso artístico para que las diferencias sociales se minimicen.
REFERENCIAS HARRIS, Marvin, 1927-2001 Introducción a la antropología general. Madrid : Alianza Editorial, 1998 GARCIA CANCLINI, Néstor. 1990 Culturas híbridas: estrategias para entrar y salir de la modernidad. Mexico : Grijalbo QUISPE LAZARO, Arturo. “La cultura chicha”. Revista Electrónica Construyendo Nuestra Interculturalidad No.1. Vol. 1: 1-7. 2004. Disponible en: www.interculturalidad.org PAREDES VELORIO, Sonia. 2002 Los conciertos como espacio de interacción de la cultura chicha. Lima. PUCP
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